lunes, 25 de junio de 2012

Sin poder dormir bien


Llevo días sin poder dormir bien, durante el día me dicen que soy como un zombi de una serie de televisión. No me concentro en las cosas y llego a mi casa cansado. Mi mujer ya me ha dado sus “remedios de la abuela” y ninguno de ellos ha funcionado. Pero lo peor no es el cansancio, ni el hecho de que no pueda dormir. Sino lo que veo cuando no duermo. A la una de la madrugada es cuando empieza, una batucada irrumpe mi habitación haciendo sonar sus tambores y pitos, y cuando terminan se van por donde han venido. A las dos aparece una siniestra mujer envuelta en un manto de ébano, en su mano izquierda porta un reloj, y en la derecha una vela encendida, a su lado, un pollo va olisqueando el camino, entonces la mujer se acerca a los pies de la cama y apaga la vela. A las tres, un avestruz va cabeceando por la habitación al ritmo de los ronquidos de mi mujer. A las cuatro, una pareja de tenistas juegan delante de nuestra cama. A las cinco presencio la obra completa del Rey Lear. Y a las seis llega un cartero, deja la bici bien aparcada en un lado de la cama y me entrega una carta, en la cual leo: “BUENOS DÍAS, Y FELIZ LUNES”.