jueves, 6 de abril de 2017

Expresiones libres

Andaba yo tan distraído por la calle admirando lo que me rodeaba para ver si captaba algo de interés en una fotografía, cuando en un edificio abandonado me percaté de que entre la maleza y mala hierba, había una perrita dando de amamantar a sus cachorros. No perdí a oportunidad de fotografiar ese momento.
 Me quedé un rato observando ese momento de paz. En ese instante un hombre al que no conocía de nada se para a mi lado para ver qué es lo que llamaba mi atención. Cuando lo descubrió, puso cara de asco y dijo en voz alta cómo esos cachorros podían alimentarse de una leche que provenía de un animal, y se marchó alzando el puño al aire gritando ¡Go Vegans!
 Me quedé estupefacto ante tal comportamiento. Cuando giré la cabeza para contemplar de nuevo la escena, otro señor se había parado a mi lado. Escudriñando la zona, advirtió también a los animales. Su rostro se contrajo poniéndose rojo y gritó: “Es que no hay vergüenza en este país, cómo se le ocurre a esa perra dar pecho a todos esos cachorros, ¿así? ¿Delante de todos? Si encuentro al dueño lo denunciaré por escándalo público”

 Y así siguió gritando hasta que lo perdí de vista. Guardé mi cámara en la mochila y decidí dejar ya a esa perrita y sus cachorros, antes de que viniera otro loco a expresar sus pensamientos.