lunes, 16 de abril de 2012

Rituales

Llego al muelle, y veo cómo un barco pesquero está a punto de atracar, en ese momento un pato sale de la nada, y se va aproximando de forma tímida a medida que el barco está llegando. Una vez puesta la marra, el pato se queda en el borde, esperando, entonces como si fuera ya un ritual realizada desde hace tiempo el pescador saca un cuenco, lo llena de agua y se lo da al sediento pato, y que éste le agradece con un batir de alas.